En la costa correntina, el húmedo calor del verano se disfruta de un modo especial ante el atardecer multicolor que cae sobre el río. Y no sólo en esa hora tan especial, sino también en las prometedoras mañanas y en la placidez de la tarde, las playas y el sol son la compañía perfecta de los caudalosos cursos del Paraná y el Uruguay, lo que conforma un paisaje perfecto para el ocio. En Corrientes hay toda una cultura de los balnearios en las costas de ambos ríos. En su mayoría se trata de espacios concesionados, con variedad de servicios para pasar la tarde o algunos días. Algunas de las ciudades que sobresalen por la belleza de sus playas son: Bella Vista, Corrientes, Esquina, Itá Ibaté, Ituzaingó, Monte Caseros y Paso de la Patria. Los sitios ofrecen su espacio para bañistas, pescadores y la práctica de deportes náuticos; aptos también para público de todas las edades y familias.
Ituzaingó es uno de los más bellos exponentes de las playas correntinas, con sus altas barrancas y extensiones de arenas de hasta 15 kilómetros sobre el río Paraná, en el norte provincial. Esquina es otro de los sitios más recomendables dentro de Corrientes para disfrutar del verano. Se encuentra en medio de un delta natural, donde confluyen los ríos Paraná y Corrientes, justamente frente a su puerto, lo cual deja a su paso hermosas playas y balnearios. A unos 20 kilómetros de la ciudad de Esquina se encuentra el Puente Santa Rosa, con cómodas zonas para acampar y practicar deportes playeros.
Bella Vista es también un buen ejemplo de lo que puede ofrecer la costa correntina: el Parque Cruz de los Milagros es uno de los principales atractivos turísticos; los muelles se han convertido en el núcleo de encuentro para pescadores y visitantes en general, muy cerca de la inmensidad del río, porque brindan una alternativa distinta.
Fuente: Ambito