Publicado: 16/02/2019
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A solo 15 kms de Puerto Madryn se encuentra el área protegida de Punta Loma, donde equipados con snorkel y traje de neoprene, se puede vivir una experiencia única y nadar con lobos marinos.
El gran desafío además de levantarse temprano, es enfrentar el viento y el agua fría.
La aventura empieza muy temprano cuando hay que acercarse al local desde donde sale la excursión para vestirnos con la indumentaria adecuada, con el traje de neoprene, los guantes, y las botas. Para luego comenzar el viaje de unos minutos embarcados dentro del Golfo Nuevo.
Hay que navegar durante 20 minutos aproximadamente para llegar al Área Natural Protegida Punta Loma, a unos 15 kilómetros, donde se pueden ver a los lobos marinos desde la lancha, ya que las aguas transparentes permiten tener una excelente visibilidad.
En la reserva hay muchísimos lobos marinos, machos, hembras y cachorros que toman son sobre las rocas de color claro, entre gaviotas y cormoranes.
Es el momento de calzarse las patas de rana, antiparras y el snorkel para entrar al agua, que es cuando nos damos cuenta que el neoprene tiene que ser justo, no debe quedar holgado porque los huecos se llenan de agua fría.
Antes de ingresar, ya nos explicaron como darnos vuelta en el agua y movernos sin molestar a otros compañeros ni a los animales. Flotar con traje de neoprene es realmente sencillo.
Cuando nos acercamos a la costa, los lobos se nos acercan, nadan, van y vienen alrededor nuestro. Sus ojos redondos nos miran con curiosidad, mientras vemos que ellos juegan alrededor nuestro con gran agilidad en su habitat. Se nos acercan, se hunden y desaparecen. Algunos se dejan tocar y acariciar mientras pasan nadando tan cerca nuestro.
Los que van y vienen de la piedra al agua son los cachorros, mientras los adultos miran desde las rocas.
El tiempo se imperceptible, y despues de casi 1 hora de hacer snorkeling hay que volver a la lancha para emprender el regreso.
Buceo en el parque
Los principales naufragios de la zona son el Kouturiaris y Jorge Antonio, que normalmente se visitan en una misma salida.
El pesquero Jorge Antonio se fue a pique durante una fuerte tormenta en diciembre del año 1991, y el buque Kouturiaris que tiene 60 metros de eslora, se hundió en la decada del 70 despues de un incendio.
Al naufragio Río de Oro es el más antiguo de la zona, es una goleta de madera de 25 metros, que se hundió hace 60 años a 18 metros de profundidad.
Frente a las costas de Madryn está la goleta Emma, de madera y metal, que se hundió en el año 1947 y había formado parte de la flota del expedicionario Shackleton en el primer viaje a la Antártida. Es considerado un naufragio de carácter arqueológico.
En torno a la goleta se creó el primer parque artificial submarino, a una profundidad de unos 17 metros.
A estos se suman el Parque Nuevo. Es un arrecife artificial con objetos que van desde automóviles a una avioneta, el buque pesquero Albatros (solo disponible para buzos avanzados) y el naufragio Miralles.
El naufragio Miralles es el Arca para buzos avanzados, ya que está a unos 30 metros de profundidad.
Es un cofre hundido en el año 1999, que contiene mensajes que esperan ser leídos recién en el año 2100.
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