Hasta fines de marzo más de 30 cruceros transitan las gélidas aguas del continente blanco.
En más de 14.000.000 km2, atestado de glaciares, bajo las rigurosas condiciones climáticas, en el continente más frío, alto y ventoso del planeta -donde se registran vientos que superan los 200 kilómetros por hora- los atractivos son numerosos. Para conocerlos hay embarcaciones - de diverso tamaño y confort, desde 50 a 500 pasajeros- que llevan en itinerarios de 10 a 20 días cuyos costos oscilan entre los U$S 4.000 y U$S 10.000.
Unos llegan a la Península Antártica y las Shetland del Sur, mientras que los de mayor duración incluyen también las islas Malvinas y Georgias del Sur. En todos los casos los pasajeros descienden en resistentes botes zodiacs para empaparse de la descomunal belleza de las costas.
Los aventureros que lo eligen como destino de viaje anhelan encontrar a los auténticos habitantes del contiene blanco.
Por ejemplo las 4 especies de pingüinos -Adelia, Barbijo, Papúa y Emperador- pero también los albatros, petreles, pardelas, skuas, gaviotines, cormoranes y palomas antárticas, por nombrar algunas aves. El mar también los sorprende con las especies que allí conviven: ballenas, especialmente se ven desde enero a marzo, y focas y elefantes marinos durante toda la temporada.
Hay tres circuitos: al Noroeste de la Península Antártica se encuentra el archipiélago de la Isla Elefante e Islas Shetland del Sur, el área más cálida y colorida de esas tierras, donde se combinan glaciares, montañas y fiordos.
Allí el viajero se sorprenderá al divisar en las costas rocosas conjuntos de líquenes, musgos e incluso dos especies de flores. Numerosas colonias de pingüinos de las especies Adelia, Papúa y de Barbijo escogen esta ribera durante el verano.
Por su parte, la región Noreste de la Península Antártica alberga impresionantes bloques de hielo y la famosa Base Esperanza, estación científica de Argentina. En materia de naturaleza es factible de reconocer una gran población de pingüinos y diferentes especies de petreles.
Finalmente, la costa Oeste de la Península Antártica presenta extensos estrechos, islas montañosas con altas cumbres, bahías protegidas y angostos canales. Dentro de los puntos factibles de visitar se destacan Bahía Paraíso, Puerto Locroy, Canal Lemaire, famoso por la belleza de su paisaje y por la presencia de numerosas ballenas.
Fuente: Los Andes Turismo