San Luis se destaca como una de las provincias más grandiosas por sus paisajes y accidentes geográficos. Ríos y montañas la convierten en un destino inigualable.
El año se escapa y ya es tiempo de ir pensando el destino de las próximas vacaciones. Norte, sur, este u oeste, sin duda ofrecen escenarios alternativos que merecen ser descubiertos al garantizar días a pleno sol, diversión y descanso.
Potrero de los Funes debe incluirse dentro de las opciones. ¿Por qué? Es un valle soñado, rodeado por sierras serpenteadas por arroyos y saltos que resultan increíbles a la vista. Es, sin duda, uno de los lugares más reconocidos y frecuentados de la provincia en la época veraniega.
Se encuentra a 20 kilómetros de la capital y se accede por las rutas provinciales Nº 20 y 18, acondicionadas perfectamente para afrontar la ola turística que se hace presente durante los meses de enero, febrero y marzo.
Signado por la historia de grupos que vivieron en la zona, se atribuye el nombre a una de las familias que residió en el paraje y lo destacó como una verdadera joya.
Simplemente, hay que dejarse llevar por el relato e imaginar un sitio repleto de árboles y ríos cristalinos que enmarcan una jornada de relax y distención. Treeking, mountain bike, cabalgatas, escaladas, pesca, natación y deportes náuticos son las actividades preferidas por los turistas que dan el presente año a año.
Uno de los atractivos superiores es el Dique Potrero de los Funes, una cuenca que comprende un área surcada por los arroyos que descienden de la falda sureste de la Sierra de San Luis. El espejo de agua, se halla a 1000 metros de altura sobre el nivel del mar rodeado íntegramente por sierras que alcanzan entre 1800 a 2000 metros de altura.
Con una superficie de 360 hectáreas, el valle se transforma en el lugar ideal para caminar y entregarse al aire puro.
Potrero de los Funes atrae por la cantidad de rincones naturales ocultos que hacen a su geografía. Salto de la Moneda es uno de ellos. Durante el recorrido se puede apreciar la belleza del paisaje, hasta finalmente llegar a un salto de agua de una altura aproximada de 15 metros.
Visitar el cerro Valle de Piedra es otra de las actividades habituales, requiere de una caminata de ocho horas en la que se bordean arroyos y escalan sierras. Es uno de los cerros más altos de Potrero de los Funes y cuenta con abundante vegetación.
El cerro San Ignacio, por su parte, se eleva a 1.328 metros sobre el nivel del mar y se accede ya sea a caballo o a pie a través de vegetación abundante.
Decenas son las opciones disponibles, las hay para todos los gustos, solo hay que decidirse.
Fuente: Notio