Las Grutas es la playa más concurrida de la Patagonia donde se puede disfrutar de aguas cálidas, extensas playas y muy lindos paisajes a orillas del Golfo San Matías.
Una larga costanera blanca recorre los balnearios del centro de Las Grutas, a orillas del cristalino Golfo San Matías.
Las postales en la costa son cambiantes, que varian de acuerdo al ritmo de las mareas. En algunos momentos los bañistas son arrinconados contra el acantilado y las las grutas cavadas en la roca por la erosión marina, y en otros momentos, se puede disfrutar de extensas playas de cientos de metros hacia el mar.
Como si fueran dos playas es necesario informarse de los horarios de marea alta y baja, para no tener problemas y salir corriendo cuando el agua ya llega al veraneante distraido.
A pesar de la latitud, las Las Grutas tiene una temperatura del agua agradable, gracias a la influencia de corrientes marinas. Cuando la marea sube sobre la plataforma rocosa, llega casi caliente y se mantiene así hasta que cubre prácticamente hasta las rodillas.
Está ubicada a 1150 kms de la ciudad de Buenos Aires, y a 280 kms de Puerto Madryn, ya en la provincia de Chubut.
Otro lugar para visitar es Playas Doradas, en Sierra Grande, que se encuentra a 150 kms al Sur de Las Grutas, que cautiva con su aire agreste y arenas interminables.
En las superficie rocosa, existen piletones que fueron excavados y que periódicamente el mar cubre y descubre, de modo que al retirarse la marea, estos huecos artificiales quedan llenos de agua de mar, incluso con algun visitante marino.
Hay piletas de diferentes tamaños y profundidades, las más bajitas son las que logran calidez en el agua y las más profundas son las favoritas de los más grandes para jugar.
Hay que se precavido al caminar entre ellas, ya que la superficie rocosa entre los piletones queda bien resbaladiza por las algas que cubren las piedras.
Las Grutas tiene cerca de diez bajadas al mar, formando una suerte de arco frente a la parte céntrica de la ciudad, donde se encuentran los principales servicios.
Al sur se pueden visitar algunas playas patagónicas poco frecuentadas para escapar del bullicio de las playas centricas.
Primero se llega a Piedras Coloradas, a sólo 5 kms del centro. Su nombre se debe a un afloramiento granítico a orillas del mar, que forma masas rocosas de color rojizo ideales para jugar o sentarse a tomar sol en la propia isla desierta. También hay que tener en cuenta las mareas, y cuando las “piedras coloradas” quedan cubiertas por el agua se puede disfrutar de los médanos para hacer sandboard y más activades.
Más al sur se encuentra el lugar conocido como El Buque, una formación rocosa que se ve durante la bajamar. Es el lugar perfecto para los cazadores de mejillones y pulpitos, que quedan atrapados en las grutas y lagunitas que se forman junto a la costa.
A otros 13 kms de Las Grutas se llega a El Sótano, donde hay acantilados que son los favoritos de muchos pescadores, mientras los chicos y la familia buscan ostras fosilizadas del cercano Cañadón de las Ostras.