Publicado: 20/09/2009
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Fuente: La Voz Turismo
Las Leñas es uno de los más afamados centros de esquí de Argentina y su fórmula se basa en el privilegiado enclave en el que se encuentra y en los servicios de excelencia que ofrece. Ideal para disfrutar entre amigos o con la familia.
A partir de enero de 1983 y después de numerosos estudios realizados en los pies del cerro Torrecillos y zona, los arquitectos Schettini - Tornesse emprendieron la construcción de tres hoteles con capacidad para 400 camas que inauguraron en julio de ese mismo año. Con 26 años de historia en la actualidad el complejo valle de Las Leñas goza del prestigio de legiones de esquiadores que se deslizaron por esas pendientes en varias temporadas. Con mas de 3.000 camas distribuidas en hoteles de tres, cuatro y cinco estrellas, apart hotels, departamentos.
Para llegar al complejo se accede por la ruta provincial 222, en un entorno donde el gris del asfalto contrasta con el manto blanco de la nieve que rodea el camino. Acompaña la postal, el serpenteante río Salado (a la derecha del camino), donde los destellos del sol acarician el suave deslizar de las aguas.
Unos 40 kilómetros antes de llegar sobre el margen derecho del camino se encuentra la laguna La Niña Encantada cuyo caudal de aguas cristalinas proviene de ríos subterráneos y encierran rocas volcánicas.
Un prolijo cartel de madera narra la leyenda, y habla de la princesa Elcha (en lengua aborigen Espejo), aborigen enamorada de un miembro de su comunidad pero de menor rango. Las presiones familiares que propiciaban la unión con otro joven de una tribu vecina y del mismo linaje determinaron la huida de Elcha y su enamorado. La persecución por un escabroso barranco los decidió a arrojarse a las aguas de donde jamás emergieron. Por ello es que en ocasiones en el fondo cristalino de la laguna se observa la imagen de la princesa.
En La Niña Encantada no está permitido pescar pero están a la orden del día las caminatas y safaris fotográficos.
Pozo de las Ánimas. La última escala, 28 kilómetros antes de Las Leñas, es el Pozo de las Ánimas, singular paisaje ubicado en el Valle de los Molles. Lo curioso de su formación son dos dolinas cársticas (depresiones geológicas), fueron erosionadas por ríos subterráneos que originaron espejos de agua verde con casi 100 metros de diámetro cada uno.
En lengua mapuche se llama Trolope-co que significa "agua de los muertos" y también es motivo de un sinnúmero de leyendas de larga data.
Lo cierto es que en el Pozo de las Ánimas se realizan safaris fotográficos y el ingreso no tiene costo.
Nieve a la vista. Al arribar al complejo Las Leñas, la primera impresión es la de los esquiadores que se deslizan por las laderas cubiertas de nieve a las que les imprimen los colores de sus trajes. Ya en esquíes o en snowboard el entusiasmo se apodera de los recién llegados por sumarse a las distintas actividades.
Las Leñas posee la mayor longitud de descenso ininterrumpido de Argentina (7.050 metros, que equivalen a siete kilómetros), y que resulta de la suma de las pistas Apolo, Neptuno y Venus.
Totaliza 28 pistas clasificadas para principiantes (verde), intermedias (azul), avanzadas (rojo) y expertos (negro), 2.000 metros de pistas iluminadas para esquí nocturno que se realiza los lunes, miércoles y sábados hasta las 19.30.
Las pistas inferiores tienen cañones de nieve artificial que garantizan nieve permanente.
Las Leñas cuenta con 13 medios de elevación que transporta hasta 10.000 personas y funcionan en horario corrido de 8.30 a 17.
Los servicios para el esquiador incluyen: 150 instructores; escuela de esquí (todos los niveles), guarderías de esquíes, atención para chicos, alquiler de equipos, talleres de reparación, y servicio médico.
Esparcimiento. Las Leñas tiene un centro comercial, restaurantes, confiterías, casas de té y discoteca. En cuanto a gastronomía hay propuestas en lo alto del cerro, (la Pirámide), en la base y en las pistas.
Las Leñas no cierra sus puertas durante el verano sino que se transforma en un parque de aventuras naturales.
El maravilloso entorno es ideal para actividades compartidas en familia con actividades programadas de pesca, trekking, montañismo, travesías en 4x4 o simplemente, dejarse ganar por la pereza y descansar con la complicidad de la tranquila vida en la alta montaña.
Fuente: La Voz Turismo
http://www.lavoz.com.ar/nota.asp?nota_id=552496
