Los viñedos de la bodega Chañarmuyo están a más de 1.700 metros de altura, a pocos kilómetros del cordón de Famatina, La Rioja.
Por valles y montañas, la Ruta del Vino Riojano propone un circuito en donde la actividad vitivinícola se combina con otras propuestas de esparcimiento como el trekking y parapente. El contacto con la cultura y el asumido placer por contemplar un maravilloso paisaje. Son ocho mil hectáreas de campos embebidos en una propuesta a gusto de un consumidor exijente, capaz de cerrar los ojos, olvidar el pasado, abrirlos y empezar a soñar.
La Ruta del Vino de La Rioja cuenta con 17 bodegas, el 75 por ciento de ellas ubicadas en Chilecito, y el resto emplazadas en Anillaco, Villa Unión y Famatina. Cinco de ellas ofrecen servicios al turista: La Riojana, Chañarmuyo, San Huberto y La Puerta. Algo interesante, y tal vez distintivo, es que el turista puede recorrer destilerías, aprender a hacer grapa con pequeños productores y disfrutar también de tecnología avanzada.
Fuente: La Capital
http://www.lacapital.com.ar/ed_turismo/2009/7/edicion_37/contenidos/noticia_5280.html