El avistaje de aves es una actividad en pleno crecimiento en nuestro país. Consejos para iniciarse, sitios recomendados y direcciones útiles.
En septiembre arribaron los primeros rayadores a los bancos de arena del río Uruguay, cerca de Colón, Entre Ríos, adonde regresan cada año para reproducirse, tras un largo viaje migratorio. Es un ave única, que usa el pico de abajo -más largo que el superior- para, volando a muy baja altura, pescar "rayando" la superficie del agua. Y es sólo una de las 1.020 especies de aves que pueblan nuestro país, y que atraen cada vez a más curiosos y amantes de las aves y la naturaleza.
En los últimos años, el turismo de observación de aves creció notablemente, tanto en el mundo como en nuestro país. Se estima que son ya 2.500 quienes se dedican a la observación en nuestro territorio, aunque en todo el planeta suman nada menos que 80 millones, y la Argentina les ofrece grandes atractivos, con 18 ecorregiones y más de mil especies de aves silvestres -12 de ellas exclusivas de nuestro país, y 50 globalmente amenazadas-, desde cóndores en los Andes a tucanes en la selva; de flamencos en la Puna a pingüinos y albatros en la Patagonia.
Datos que marcan el creciente interés por el tema: en estos días están finalizando, en todo el país, múltiples actividades por el Festival Mundial de las Aves -del que participan 88 países-, de parte de las entidades agrupadas en BirdLife International. Hay charlas, exposiciones de fotos y salidas de observación. Y por el Programa Aves y Turismo, que impulsan la Secretaría de Turismo de la Nación y Aves Argentinas, provincias, municipios y privados desarrollan cursos de capacitación para guías. La promoción incluye listados de especies, miradores en puntos estratégicos y circuitos ecoturísticos señalizados.
Este turismo en pleno crecimiento tiene un gran potencial. Y sólo exige admiración por la naturaleza y su conservación, binoculares, cámara de fotos, guía y libreta de anotaciones y ganas de madrugar: las mejores horas para el avistaje son al amanecer y al atardecer -sobre todo luego de un día de lluvia-; y la mejor época, la primavera y el verano. Las salidas pueden ser específicamente de observación o incluir esta actividad en otras, como trekking, cabalgata o mountain bike.
Sitios recomendados
Aves Argentinas identificó 273 "Areas Importantes para la Conservación de las Aves" (AICAs) en el país, que representan el 12% de la superficie del territorio, pero lo cierto es que para iniciarse en la actividad no hace falta ir lejos. En realidad, en casi todos los lugares se pueden encontrar aves, incluso en una plaza en medio de la ciudad. Pero para observarlas en mayor cantidad o variedad, es aconsejable acudir a lugares con vegetación autóctona o a ambientes acuáticos, como las lagunas. Las áreas naturales protegidas (parques nacionales, parques provinciales y reservas) son ideales porque suelen contar con buena accesibilidad y senderos.
A la hora de definir sitios clave, se pueden mencionar:
Reserva Ecológica Costanera Sur (Buenos Aires): en ella se han identificado casi 300 especies, más otras 22 exóticas escapadas o liberadas de cautiverio.
Ceibas (Entre Ríos): a 160 km de Buenos Aires, sus características naturales posibilitan ver un importante número de especies en poco tiempo.
Punta Rasa (San Clemente del Tuyú): las playas del sur de la Bahía Samborombón son visitadas desde agosto por miles de chorlos, playeros y gaviotines migratorios, que llegan del Hemisferio Norte. Hay Centro de Interpretación.
Esteros del Iberá (Corrientes): con una superficie de casi 1,3 millón de ha, es el área protegida más grande del país, y alberga unas 350 especies.
Parque Nacional Iguazú (Misiones): posee una extraordinaria biodiversidad, con 418 especies registradas, de las cuales 58 son exclusivas (no se encuentran en ningún otro parque nacional).
Otros recomendados son la Reserva Otamendi (Campana), los parque nacionales Calilegua (Jujuy) y Nahuel Huapi (Neuquén y Río Negro), y la Península Valdés (Chubut). Además, Aves Argentinas colabora con la construcción de observatorios en los parques El Rey (Salta), Río Pilcomayo (Formosa), El Palmar (Entre Ríos), Perito Moreno (Santa Cruz), y Tierra del Fuego.
También hay iniciativas provinciales, como en Neuquén y Santa Fe, que elaboraron guías de aves propias. Una buena oportunidad para iniciarse, el próximo 28 de noviembre, cuando Aves Argentinas organiza una salida por la reserva Costanera Sur.
Fuente: Clarín Turismo
http://www.clarin.com/suplementos/viajes/2009/11/01/v-02031311.htm