Propuestas para disfrutar de la naturaleza con buenas dosis de cultura, gastronomía y aventura.
Una escapada cuando despunta la primavera puede ser una terapia rejuvenecedora, por eso le proponemos un destino cordobés que tiene mucho para ofrecer: hermosos paisajes, precios accesibles y actividades para todos los gustos. Vamos con la propuesta.
El recorrido desde Mendoza siempre es agradable, mate en mano, al ingresar a la serranía los colores despuntan sin preámbulos, ríos, arroyos, diques, y entre tanto diversos emprendimientos domésticos en los que vale la pena detenerse: dulces caseros, restaurantes campestres, artesanías en cuero, entre otros.
El tonito cordobés y la sencillez de la gente colocan al viajero en clima, la escapada ya es todo un éxito.
Una vez en Río Ceballos, tras haber contratado el alojamiento de su preferencia (hay para todos los gustos y bolsillos), es momento de ponerse activos.
Desde el del Km 0 de Río Ceballos, el Paseo Humberto, Francia parten numerosos circuitos turísticos temáticos para que el visitante se lleve los mejores recuerdos. Este lugar se convierte en un punto orientativo, en cuanto a la distancia y ubicación de cada uno de los atractivos.
Aquí se encuentran los carteles que grafican la ubicación y modos de acceso a cada uno de los circuitos turísticos propuestos en Río Ceballos y en Sierras Chicas (hay folletos en Información Turística). Veamos de qué se trata:
"La devoción de un pueblo", Grutas y Capillas recorre los templos de la localidad; "Kilómetro a la Carta" incursiona en la gastronomía artesanal con 3 buenas propuestas; "Cantares de Agua" Saltos y Cascadas precisamente sigue el curso de arroyos y sus singulares caídas. "Senderos Serranos" invita con caminatas por el entorno natural hacia Agua del Peñón bordeando el arroyo Mal Paso (se puede optar también por hacerlo a caballo o en auto).
"Pisaditas" se trata de unas rocas de granito que sólo se encuentran en el cerro Ulloque a 800 m.s.n.m. con huecos productos de la erosión que asemejan pisadas. "Selva Negra", por su parte une el arroyo "Mal paso" de "Agua del Peñón" con el cerro "Ñú Porá".
Se atraviesa un bosque de siempre verdes de gran altura que pasa de la luz a la penumbra en un momento. Hay senderos de interpretación de la flora autóctona y ofrece la mejor panorámica del valle.
"Manos Criadoras" implica una visita un criadero de truchas donde se puede pescar, hay un restaurante para almorzar y quienes deseen pueden alojarse en sus cabañas.
Paseos culturales, artísticos y mineros, son otros por las rutas de las sierras e integran la propuesta del municipio. Río Ceballos es un paso obligado en el trayecto de las Estancias Jesuíticas, tres de las cuales se encuentran en el valle de Sierras Chicas. Por supuesto, hay un circuito que las incluye el "Ventana a la Historia".
Este itinerario guía hasta la Estancia Santa Catalina fundada en 1.622 y considerada uno de los patrimonios más importantes de la provincia. También a la Estancia Caroya, de 1616, que fue el primer establecimiento rural organizado por la Compañía de Jesús y a la Estancia Jesús María, reconocida en un tiempo por su producción vitivinícola.
La Reserva Hídrica Natural "Parque La Quebrada" es un imperdible de la escapada, a sólo 7 Km. de la ciudad. Con un paisaje encantador entre las sierras y el espejo de agua puede pasar algunas horas en compañía de los sonidos tenues de la naturaleza o acampar en la zona del perilago.
El contacto con la naturaleza está asegurado por ejemplo tomando los senderos que conducen a las cascadas Los Guindos y Los Hornillos. También podrá disfrutar de deportes náuticos como surf o canotaje, no está permitido utilizar embarcaciones impulsadas con motor.
Desde la Playa de los buzos es posible emprender una excursión inolvidable. Dada la transparencia del agua las inmersiones son fantásticas.
Alojamiento: cabañas para 4 desde $ 230.
Hotel base doble $ 180.
www.rioceballos.com
Fuente: Los Andes Online