La iglesia construida entre 1882 y 1891 por el arquitecto Fray Luis Giorgi, junto con el convento ocupa casi una manzana. Se trata de un conjunto de edificios heterogéneos, levantados en distintas épocas y sin un criterio uniforme. Del noviciado del siglo XIX subsisten la celda de Fray M. Esquiú y algunas arquerías.
Su perfecto ordenamiento interior la destaca como una de las mejores obras de la región. En el interior de esta iglesia se conserva una urna que contiene el Corazón de Fray Mamerto Esquiú.
La iglesia que se destaca por su altura y ubicación, está en una esquina, sobre una plazoleta a la que dan los portales con una gigantesca espadaña que completa la fachada. Fue declarado M.H.N. en 1941.