En un inmejorable balcón al río, en el extremo ribereño de calle Pellegrini, se encuentra el monumento (declarado Monumento Histórico Nacional por Decreto N° 27.286 del 28 de octubre de 1949) que conmemora el bautismo de fuego de la armada argentina, el 2 de marzo de 1811, cuando la Goleta "Invencible", el Bergantín "25 de Mayo" y la Balandra "América", se batieron con la flota realista. El monumento fue inaugurado el 2 de marzo de 1947, con la presencia del Presidente de la República, Juan Domingo Perón, y al año siguiente fueron depositadas en su cripta las cenizas de Juan Bautista Azopardo, quien estaba al mando de aquella heroica escuadrilla.