Publicado: 06/12/2012
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En los últimos años surgieron nuevos destinos turísticos con el lema de vivir despacio, tranquilos, sin amontonamiento ni las aglomeraciones que se generan por la llegada masiva de visitantes. Los turistas que buscan playas y paz, tienen opciones en la costa de la provincia bonaerense con buenas arenas sobre el mar atlántico, y el plus de la tranquilidad en playas casi vírgenes.
Entre los principales lugares, encontramos varios.
Al sur de Villa Gesell, encontramos varios pueblos que completan la urbanización, pero son mas tranquilos, como ser Mar de las Pampas, Las Gaviotas y Mar Azul.
Estos balnearios son ideales para buscar tranquilidad en medio de los bosques de coníferas.
Cerca, hay lugares interesantes para conocer, como el Faro Querandí en vehículos 4x4, también se pueden hacer cabalgatas por las dunas y tomar el té, en las casas de té de repostería alemana.
Un poco mas al Sur, cerca de Mar del Plata, hay otras localidades que también ofrecen tranquilidad, como ser Mar Chiquita, Santa Clara del Mar, Playa Dorada y Mar de Cobos.
Mar Chiquita tiene una ubicación particular, cerca de una laguna que está conectada con el mar, es única del país y una de las pocas del mundo.
Esta laguna conforma una biósfera singular con una variada flora y fauna, que recibe el aporte de agua dulce de arroyos y salada proveniente de la entrada marítima. Son 67 km de playas que combinan médanos y acantilados y que se caracterizan por una atmósfera relajada y familiar en cada una de esas ciudades.
Siguiendo mas al Sur, encontramos lugares cerca de Necochea como Arenas Verdes que queda a 8 kms.
Arenas Verdes es un destino casi desconocido, con playas repletas de médanos forestados y gaviotas que surcan el cielo, cuyo primer balneario fue construido hace unos 5 años.
Cerca en el partido de Tres Arroyos, encontramos otros balnearios muy tranquilos como Claromecó, Reta y Orense, que crecen en turistas año a año, pero se siguen caracterizando por la tranquilidad, la calidez de sus pobladores y la inmensidad de sus playas.
Mas al sur, llegamos a Monte Hermoso, quizás con las aguas más cálidas que el resto de las playas bonaerenses, y a pocos kilómetros llegamos a Pehuencó.
En el límite entre Buenos Aires y Río Negro, está San Blas de los Sauces. Más precisamente en la Isla del Jabalí e integrando un ecosistema de islas, bancos y aguas de poca profundidad, que diseñan una playa de canto rodado recostada sobre un mar sereno, de temperaturas templadas.
El recorrido marino por las islas, la flora y fauna de sus playas y las delicias a base de mariscos que sirven en los restaurantes son más atractivos del lugar. Carmen de Patagones y la costanera del río Negro, las termas ‘Los gauchos’ en Villalonga y las cuevas Maragatas son más alternativas para pasarla muy bien.
