Sobre la costa, y en la línea de media marea, se encuentra el paraje denominado “Rocas Chicas”. Allí la playa cambia su aspecto arenoso por el de una costa salpicada por “lentes” de sedimentos limo-arcillosos.
Es por la acción de la erosión marina y por su fauna, que se observa en baja marea, un paisaje costero de singular belleza. Estos “lentes” son además portadores de una incalculable riqueza paleontológica y arqueológica.